Tras mucho esperar y esperar, finalmente ayer se hizo otro sueño realidad: ver a Mariah en España. El concierto del 2000 me cogió en pañales (de fan) y finalmente han tenido que pasar 18 años para que alguien haya decidido apostar por Mariah en España. Y es bastante lógico, pues la popularidad de Mimi en nuestro país no es muy grande y una gran parte de la gente no la respeta como artista.
Mariah llegaba a España tras su concierto en Bruselas y permanecía en su fortín del Villa Magna, donde verla en cualquier momento del día o de la noche fue misión imposible, pues el aparcamiento subterráneo evitaba cualquier atisbo de posibilidad. Algunos lambs tuvimos recompensa a la salida de la fiesta de fin de gira que dio el domingo por la noche, aunque en mi caso fue producto de casualidades, tras estar esperando varias horas, apareció un lamb llamado Manu que nos hizo llegar al restaurante justo 2 minutos antes de que se fuera. Muchas gracias!
Vista de cerca, aunque sin premio del autógrafo, solo quedaba disfrutar del concierto en el Wizink Center, que aunque no estaba lleno, presentaba un estado bastante aceptable. Alguna reubicación y un telón negro disimularon las ventas, que no fueron todo lo altas que se esperaría el promotor, aunque con las entradas sencillas, en fila 20, a 134,50€ y los packs especiales por las nubes, era normal que no se vendiera todo sabiendo que la base de fans de Mariah no es tan alta y que salvo algún anuncio en redes sociales, tampoco se publicitó el concierto como se debía. También hubo mucho postureo de gente que solo quería escuchar All I Want For Christmas Is You y hacerse la foto para el Instagram. Un poco de todo.
En cuanto al concierto, como a todos los que estábamos allí, se nos hizo corto, muy corto. Aunque es algo que uno se lo espera por las anteriores giras de Mariah, un espectáculo de 80 minutos para el precio de las entradas, se antoja escaso, sobretodo sabiendo que se deja atrás varias canciones, como Miss You Most (At Christmas Time) o One Child, que sigue pareciendo inexplicable que no esté en su repertorio navideño.
En cuanto al espectáculo, una escenografía, obviamente, muy navideña, con árbol, regalos, soldaditos de plomo (de carne y hueso) o bailarinas con tutú, aderezando al plato fuerte, una Mariah mucho menos estática de lo que nos tiene acostumbrados en las actuaciones en directo y que se mueve por todo el escenario, que para eso es suyo. En cuanto al vestuario, hizo 3 cambios durante el concierto, pasando del blanco al rojo o hasta con una chaqueta de domadora. Todo un espectáculo de color, aunque lo que más importa en este caso, más que como va vestida, es como canta.
Mariah ofreció un buen repertorio, aunque como ya he dicho antes, le faltaron canciones. Hark The Herald Angels Sing fue mágica, al igual que Christmas Time is in The Air Again, por ejemplo. Es complicado quedarse con una sola canción, pues casi todas fueron especiales por algún motivo y otro y seguramente haya gente que se siente más identificado con una canción que con otra. Personalmente eché en falta One Child y Miss You Most, como he dicho antes, y me hubiera gustado que When Christmas Comes no hubiera sido prácticamente toda en playback, ya que el resto del concierto fue prácticamente 100% en directo. Metió varias no navideñas en el show, como Emotions, con gran acogida del público, al igual que We Belong Together y Hero, que contó con una lluvia de globos iluminados, iniciativa lamb de gente como Albert, que se esmeró en intentar que todo saliese bien.
Solo espero que Mariah no nos haga esperar otros 18 años, aunque sea en un recinto más pequeño, siempre es especial tener un concierto en casa y ver a tantas caras conocidas disfrutar bajo el mismo techo.
Próximamente intentaré subir algunos vídeos, una vez que pueda ponerme al día ya que ha sido un fin de semana de muchos viajes, madrugones y poco sueño 🙂